THE ROLLING STONES: "Sticky fingers" (1971)

¡Feliz cumpleaños “Dedos Pegajosos”!
Sí amigos! Tal día como hoy veía la luz uno de los artefactos más perfectos que un ser humano pueda escuchar. Han pasado casi 40 años y sigue ahí presente en toda buena colección de discos que se precie.
Es difícil poder aportar algo nuevo sobre este álbum, ¿verdad? ¿Qué más puede uno decir que no se haya escrito ya? Creo que todos nosotros estaríamos horas e incluso días hablando de las sensaciones que nos produce cada vez que empieza a rugir la aguja del tocadiscos al son de “Brown sugar”. Estaríamos como locos hablando de la portada de la bragueta diseñada por Andy Warhol, la producción de Jimmie Miller, El Hammond de Billy Preston, el piano de Nicky Hopkins, Jim Dickinson o Ian Stewart, la aportación y la finura a la hora de tocar de un tipo como Mick Taylor, la presencia con la slide guitar de Ry Cooder, la importante labor de Bobby Keys en esa sección de viento irresistible, los arreglos de cuerda de Paul Buckmaster, la influencia en su música de un tipo como Gram Parsons, la presencia de Marianne Faithfull en la letra de “Sister morphine”, las relaciones personales entre los miembros de la banda que ya de pos sí daban para un libro, sin contar el tema de las drogas en sus alocadas vidas, el logotipo de la lengua por primera vez y así podíamos seguir durante horas porque “Sticky fingers” es en sí mismo todo un mundo.

Por supuesto, siempre hay que resaltar por encima de todo al binomio Jagger/Richards y el trabajo oscuro detrás de su batería del inigualable Charlie Watts. No se concibe el nombre de los Stones sin este trío mágico presente en todos los álbumes de esta legendaria banda que para mi gusto alcanza su techo creativo con este descomunal trabajo.
Hoy es el día perfecto para volver a escuchar todas estas maravillas que componen este álbum. Ahí están y seguirán perdurando hasta el fin de los tiempos “Bitch” con ese riff demoledor, los aires soul de “I got the blues”, blues añejo con ese pedazo de versión que es “You gotta move”, el single perfecto como es “Brown sugar”, y se te pondrá nuevamente la piel de gallina al escuchar “Sister morphine”, “Wild horses” y ese toque country de “Dead flowers”. Por no hablar de un tema como “Can't your hear me knocking’” ¿la mejor composición de los Stones?
“Sticky fingers” es un monumento a la grandeza del Rock’n’Roll y podrán seguir pasando centenares de años que seguirá sonando tan fresco como el primer día. Nadie en las futuras generaciones podrá destruir semejante diamante en bruto ¡nadie!
COLOSAL.