THE BABY HUEY STORY: the living legend (1971)

A Baby Huey ya lo conocía desde hace un buen tiempo gracias a su inolvidable versión del “A change is gonna come” de Sam Cooke.  Esa cover fue determinante en su día para catar su único álbum aunque sin llegar a profundizar como es debido. La falta de tiempo y el querer escuchar tanto a la vez hace que en ocasiones relegues auténticas obras maestras como la que nos ocupa hoy.

Afortunadamente, cuando me puse a completar mi disco duro para esta temporada fuera de casa tuve el acierto de recuperar este álbum y darle un nuevo repaso más exhaustivo. La experiencia esta vez fue mucho más enriquecedora y positiva. Es más, puedo decir que ha sido uno de los discos que más escuché estos últimos tres meses. Hubo incluso alguna semana que caían un par de audiciones enteras o no era extraño que mi tema favorito “Hard times” sonase tres veces seguidas en mi iPod. Vaya, que estuve totalmente atrapado por el hechizo musical de este hombre a finales del año pasado.

La verdad es que la vida artística de Baby Huey fue breve, muy breve. Sólo tenemos unos pocos singles y este álbum editado al poco tiempo de morir de un ataque al corazón con tan sólo 26 años. No quiero ni pensar lo que pudo haber dado de sí si este hombre hubiera seguido en vida. El talento y la genialidad marcaban su ADN pero el destino le tenía reservado un fatal desenlace lo que impidió incluso que viese editado este disco. Una desgracia y una pena.

Los amantes del sonido soul/funk no pueden dejar pasar este artefacto. Es la clase de disco que te va atrapando lentamente sin remisión. Desde el festival funk con la inicial “Listen to me” (eso es lo que tenía que sonar en las discotecas y no la basura que inunda las pistas de baile), la estremecedora “A change is gonna come” (posiblemente la mejor versión hecha de este pedazo de clásico) hasta pasar por esa envolvente “Hard times”, la versión de los Mama & The Papas “California dreamin’” u otra de mis favoritas como es “Running”, finalizando con la instrumental “One dragon two dragon”. Y todo bajo la dirección de un coloso del género como era Curtis Mayfield.  

Discazo del copón que bien vale la máxima puntuación, así de claro!!