
Seguimos con nuestra ruta de conciertos por la capital y este sábado le tocó el turno a Lucinda Williams en una repleta Joy Eslava que esperaba con los brazos abiertos a la cantautora norteamericana. La expectación era máxima y nosotros no podíamos ser ajenos a esas ansias por ver a esta gran dama de la música. Alrededor de las seis de la tarde nos acercamos por la sala y no topamos con nuestro colega
Tsi-Na-Pah que nos da en todo el morro con las firmas en todos sus libretos de la diosa de Louisiana. ¡Dios, justo por diez minutos, no damos con ella! pero al acabar el bolo, nuestro esfuerzo, paciencia y espera tendría su justa recompensa. Pero, no me quiero adelantar y ese encuentro merecerá un capitulo aparte y una entrada como Dios manda cuando vuelva de este viaje.
Buick 6, la banda que acompaña a Lucinda, fue la encargada de abrir fuego con temas instrumentales. Nada del otro jueves y sólo destacaría un excelente medley de canciones de Led Zeppelin con un "Black Dog" que nos hizo un poco calentar motores antes de que se avecinará lo buenos unos minutos más tarde.
Pasadas las nueve de la noche, entró en escena Lucinda con "Real love", el tema que abre su excelente último disco. Estamos en un sitio envidiable, a sólo un metro debajo de ella y parece un sueño tenerla tan cerca. Muy tímida en todo momento, su mirada se pierde al frente y nunca mira las primeras filas. En algún momento esboza una sonrisa de agradecimiento al caluroso recibimiento del público asistente. La banda suena compacta, destacando el batera Butch Norton que le pega de cojones en todo el bolo.
Sigue el recital con dos de mis favoritas como "Right in time" y sobre todo "I lost it" que suenan poderosas y que ya dan a entender que este concierto será celestial. Las expectativas se cumplen y son de esas noches que recordarás durante un buen tiempo.

Un pequeño respiro llega con "People talkin'" y "Tears of joy" pero rapidamente vuelve atacar con una trilogía perfecta como "Pineola" , "Drunken Angel" y la profunda "Out of touch" . A esas alturas, ya me estoy dando cuenta que Lucinda nos ha salido en este bolo (no sé cómo estuvo en el resto de la gira) con su lado más rockero y se lo agradezco enormemente. No me malinterpretéis, me gusta su lado intimista pero la prefiero con más dinamismo y energía. Y eso es justo lo que estaba ofreciendo y lo seguía confirmando con trallazos como "Come on" y sobre todo un adrenalítico "Honey Bee" que retumbó los cimientos del Joy Eslava. La recta final fue de infarto con la potente versión que hizo de "Joy" y el final de fiesta a base de buen rock'n'roll con la cover de AC/DC "It's a long way to the top (if you wanna Rock'n'Roll)". En el último bis, Lucinda Williams se atrevió a interpretar en castellano, y acompañada únicamente por su guitarra acústica, el "Adios, corazón amante" de Violeta Parra. Tuvo que repetir la canción al equivocarse en uno de los versos pero se le perdona. Esta mujer también es humana. En definitiva, gran noche de rock'n'roll a cargo de una de las artistas más grandes de las últimas tres décadas. Había que ver las caras de felicidad del personal al salir de la sala para dar paso a los discotequeros dispuestos a comerse la noche con su "
chumba chumba". ¡¡Qué contraste, por Dios!!
Hoy nos espera The Eagles y estas horas de la mañana ya estoy más que nervioso. Os dejo el set-list firmado por Lucinda Williams, cortesía de
Paulamule que está en todo!!