Desde mi retiro hace más de un par de meses, estoy
escuchando parte del material que me llevé en mi disco duro y la verdad es que
estoy disfrutando como un enano. Me estoy centrando sobre todo en discos
editados hace un montón de años y no en novedades que, dicho sea de paso, cada
vez me llenan menos. Los grupos actuales no hacen más que repetir esquemas,
están faltos de carisma y todo con una actitud que en muchos casos deja mucho
que desear. Por supuesto, hay excepciones pero la tónica general es
preocupante. Tiempos pasados siempre serán mejores y más si hablamos de
rock’n’roll, o ¿no?
Para empezar a hablar de lo que fui escuchando con sumo
gusto estas últimas semanas lo haré con Fastway, la banda que creó Eddie “fast”
Clarke, Pete Way (este último no llegó a tocar en este disco) y Jerry Shirley (Humble Pie) a principios de
los 80’s. La verdad es que siento un poco de vergüenza por no haberme acercado
a este álbum hasta ahora y más siendo un fan total de los Motórhead clásicos y
de UFO. Se ha hablado tanto de ellos en el pasado que me es muy difícil
explicar cómo no lo caté alguna vez. Nunca es tarde y a mí me ha tocado a
finales de este año 2013 descubrir este hard rock que tan bien se estilaba en
aquella época.
¿Y qué tal me está sentando? Pues sensacional, como no
podía ser de otra manera, cuando estamos ante músicos de gran categoría.
Excelente hard, hecho con oficio, donde las canciones suenan compactas y
robustas. Himnos para canturrear en alto como es el caso de “Easy livin’”, riffs
matadores en “Say what you will”, una macarrada propia del movimiento sleazy de
L.A. como es “Feel me touch me” y de propina una excelente “Far far from home”
entre otras golosinas.